lunes, 2 de diciembre de 2013
Lysa TerKeurst
“Pónganse toda la
armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo. Porque
nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra
autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra
fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales.” Efesios 6:11-12
(NVI)
Lectura:
La mayoría de los días me
levanto sintiéndome bastante feliz. No
es que ande de humor para una fiesta, pero generalmente no me siento enojada
cuando me levanto. Me despierto y las cosas se ven bien, balanceadas, frescas y
llenas de posibilidades. Y entonces inevitablemente algo va y choca contra mi
felicidad.
Un drama madrugador de parte de alguien en mi familia. Es
impresionante lo que un día de cabello indomable puede hacerle a la actitud de
una adolescente.
O alguien olvidó algo para la escuela. Y entonces alguien
de mi familia quiere que de repente su irresponsabilidad se vuelva mi urgencia.
O un correo electrónico de parte de alguien que
claramente encuentra placer tratando de hundir a los demás.
O yo calculo mal mis tiempos y de pronto ando a la
carrera, de prisa y estresada.
O mi esposo, Art, cambia el termostato del aire
acondicionado de la casa y baja la temperatura a 68°F y yo no dejo de temblar
hasta que la temperatura se acerca a los 72°F. Es increíble cuánta diferencia
hacen cuatro grados.
Muchas cosas pasan. Cosas que chocan contra mi felicidad.
Y de pronto me encuentro fuera de balance y un poco menos amable.
¿Te suena familiar?
Bueno, yo estoy aprendiendo un poco sobre cierta
perspectiva mental que necesito cuando hay cosas que se topan contra mi
felicidad. En ese momento, Satán está tramando algo para que yo le ayude. Si él me puede empujar al
punto en el que reacciono con enojo es como encender una chispa cerca de un
charco de gasolina.
Aún la chispa más pequeña puede iniciar un gran fuego. Un
fuego que se extenderá y se sentirá mucho más grande que lo que merecía la
situación inicial.
Considera, por ejemplo, la discusión sobre la temperatura
del aire acondicionado de mi casa.
Debió haber sido una simple discusión sobre el
termostato. Pero agrégale un poco de enojo y de pronto las ideas en mi cerebro
escalaron al punto de que ya estaba por convencerme a mí misma de que mi esposo
Art era completamente insensible y que no se preocupaba por mí en lo más
mínimo.
¿Estaba en lo cierto? Por supuesto que no. A él
simplemente le gusta estar en su casa sin tener que estar sudando. Y claro,
nosotros podíamos llegar a un acuerdo mutuo sobre la temperatura, o yo podía ir
a ponerme unos calcetines y una sudadera.
Pero en lugar de eso, cuando él choca contra mi
felicidad, se genera una “oportunidad para crecer” que nos deja sintiéndonos un
poco escaldados.
En otras palabras, yo caigo en el juego que Satán tramó y
lo ayudo a lograr su objetivo. Recuerda, justamente el nombre de Satán
significa “el que lanza algo entre dos personas, causando una separación”.
Puede ser una cuestión de la temperatura, el estar apretado en las finanzas, un
comentario malinterpretado, o una de los millones de pequeñas cosas que pueden
chocar contra nuestra felicidad… pero tenemos una opción.
Podemos elegir caer en las trampas de Satán y permitir
que funcionen sus esfuerzos para separarnos de lo mejor de Dios. O podemos
elegir luchar por nuestras relaciones y en contra de los intentos de Satán por
separarnos.
Cuando pienso en estos términos, esto me ayuda a
identificar el verdadero enemigo.
Mi verdadero enemigo no es ninguna de las personas que se
topan contra mi felicidad. Mi verdadero enemigo es aquel que trata con todas
sus fuerzas de llevarme a un estado de mal humor y a ayudarlo a destruir todo
lo que yo amo.
Sabiendo que necesito una estrategia contra estos
ataques, me refugio en la sabiduría que he encontrado en Efesios 6:11: “Pónganse toda la armadura de Dios
para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo.”
Así que mejor retrocedes y te vas, Satán. Yo sé de tus
artimañas. Tú eres mi enemigo, no las otras personas.
Y ahora tengo un plan totalmente nuevo para cuando
alguien o algo choca contra mi felicidad, empezando por encontrar el par de
calcetines y una sudadera para ponerme en la cueva de hielo que a veces es mi
casa.
Amado Señor, a
veces mi felicidad se ve truncada y mis emociones pueden más que yo. Ayúdame a
reaccionar de manera que te honre a ti en vez de reaccionar de forma que
aliente los planes de Satanás. En nombre de Jesús, Amén.
Recursos relacionados:
Cuando compras algún recurso a través de los Ministerios Proverbios 31 dejas una huella en la eternidad porque tu compra apoya las diversas esferas que sin costo alguno ofrece este ministerio para dar esperanza. Quisiéramos competir con los precios que ofrecen los enormes almacenes que venden en línea, pero sencillamente no podemos hacerlo. Por lo tanto, agradecemos muchísimo todas y cada una de las compras que hagas con nosotros. ¡Gracias!
Más que apariencias: estudio en línea por
Wendy Bello basado en el libro de Lysa
¿Qué se atraviesa en tu felicidad y te hace sentir fuera
de balance?
¿El darte cuenta de que no es sólo que tú te sientas
atropellada, sino que es un truco de Satanás para separarte, puede darte una
perspectiva diferente?
Versículo poderoso:
Santiago 4:7, “Así que sométanse a Dios. Resistan al diablo, y él huirá de ustedes.” (NVI)
© 2013 de Lysa
TerKeurst. Todos los derechos están reservados.
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(Atom)
Visítanos en Facebook
Archivos del Blog
-
►
2012
(53)
- ► septiembre (4)
-
►
2011
(50)
- ► septiembre (4)
-
►
2010
(48)
- ► septiembre (4)
-
►
2009
(50)
- ► septiembre (4)
-
►
2008
(52)
- ► septiembre (5)
-
►
2007
(49)
- ► septiembre (4)
1 comments:
This way my pal Wesley Virgin's adventure launches with this SHOCKING AND CONTROVERSIAL VIDEO.
Wesley was in the army-and soon after leaving-he found hidden, "self mind control" tactics that the CIA and others used to get everything they want.
THESE are the EXACT same secrets lots of famous people (notably those who "became famous out of nowhere") and top business people used to become rich and famous.
You probably know how you use less than 10% of your brain.
Really, that's because most of your brainpower is UNCONSCIOUS.
Perhaps that expression has even taken place INSIDE OF YOUR very own head... as it did in my good friend Wesley Virgin's head seven years ago, while riding an unregistered, trash bucket of a car without a driver's license and $3 in his pocket.
"I'm very fed up with living paycheck to paycheck! When will I become successful?"
You took part in those types of conversations, am I right?
Your success story is waiting to be written. All you have to do is in YOURSELF.
Watch Wesley Virgin's Video Now!